viernes, 25 de octubre de 2013

El hombre del faro


Cuando veo un faro me suele venir a la cabeza la imagen del farero, una figura ya prácticamente extinguida. Me lo imagino solitario, refugiado en su pequeño cubículo, mientras fuera ruge la tormenta y las salpicaduras de las olas golpean contra la ventana. En los días plácidos y soleados, me lo imagino fumando un cigarrillo en el portal del faro, viendo pasar las barcas y saludando con una mano a aquellos niños que le han dedicado algún gesto. Y no sé por qué, siempre me lo imagino callado, rumiando para sus adentros. Debajo de su apariencia serena, añorando desesperadamente alguien con quien hablar.


2 comentarios: